Suelo llegar a mi casa del pueblo los sábados de noche, así que no hay mucho que pueda hacer a esas horas ya.
Pero siempre, llueva o haga calor salgo de la furgoneta y me recibe ese aroma a mar tan especial, libera mi alma de presiones y problemas, mi espíritu de xana despierta al oler el agua y la alegría me inunda, justo después voy a mirar mis flores y plantas,
En esta época los olores de las noches son increíbles, la combinación de trompeta de los ángeles, rosales, madreselva, claveles, amapolas, don diegos,...hacen de las noches de los sábados una fiesta para mis sentidos.
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